En Requiem for a dream, estamos ante el retrato de la paranoia que envuelve a la sociedad actual y a un nivel planetario. Con una facturación efectista y muy cercana a la también celebrada película El club de la lucha de David Fincher, Aranofsky emplea las técnicas más variadas como la doble pantalla, con algunos momentos muy logrados, aceleraciones de la imagen, planos destalle muy cortos, repeticiones constantes de las mismas acciones, etc. Elementos que a medida que transcurre el film nos arrastra hacia un estado opresivo y claustrofóbico, similar al que ahoga a los protagonistas. No obstante, deberíamos retrotraernos hacia el momento en que los estados de bienestar se desmoronan y la sociedad se vuelve fragmentaria, y principalmente, en una comunidad como la americana donde proliferan como setas las filias más sorprendentes. Por ello, en Requiem for a dream se muestra el camino de sus protagonistas en pos de la autodestrucción en un intento desesperado y a cualquier precio del alcanzar su sueño, escapar de la sociedad donde las expectativas de progreso para determinados grupos han sido aniquiladas, no es otra cosa que el conocido lema, “Todo por un sueño”, muy similar a la imagen que ofrece el programa televisivo que bombardea constantemente a la madre de Harry, donde nos prometen la felicidad a la carta, constantemente, con un solo golpe de mando y con risas enlatadas. Sin embargo, tras este falso sueño se esconde un problema más amplio, siempre latente y nunca resuelto, que no es otro que el problema de la existencia; es decir, el problema de la existencia en el mundo contemporáneo, donde las desigualdades son enormes dentro de una misma comunidad, así como con respecto a otros países. Camuflado bajo un deseo de puro hedonismo, ya sea mediante el consumo de todo tipo de sustancias alucinógenas o evasivas, o mediante la ascensión en el efímero mundo de la televisión, nuestra sociedad esconde el anhelo por huir de su imposibilidad más grande, ese desasosiego que nos persigue como una sombra, como un amigo fiel que no cumple su función, el no ser nunca…
En Requiem for a dream, estamos ante el retrato de la paranoia que envuelve a la sociedad actual y a un nivel planetarioj emplea las técnicas más variadas como la doble pantalla, con algunos momentos muy logrados, aceleraciones de la imagen, planos destalle muy cortos, repeticiones constantes de las mismas acciones, etc. nos arrastra hacia un estado opresivo y claustrofóbico, similar al que ahoga a los protagonistas. Por ello, en Requiem for a dream se muestra el camino de sus protagonistas en pos de la autodestrucción en un intento desesperado y a cualquier precio del alcanzar su sueño, escapar de la sociedad donde las expectativas de progreso para determinados grupos han sido aniquiladas, no es otra cosa que el conocido lema, “Todo por un sueño”, muy similar a la imagen que ofrece el programa televisivo que bombardea constantemente a la madre de Harry, donde nos prometen la felicidad a la carta, constantemente, con un solo golpe de mando y con risas enlatadas. Sin embargo, tras este falso sueño se esconde un problema más amplio, siempre latente y nunca resuelto, que no es otro que el problema de la existencia; es decir, el problema de la existencia en el mundo contemporáneo, donde las desigualdades son enormes dentro de una misma comunidad, así como con respecto a otros países. Camuflado bajo un deseo de puro hedonismo, ya sea mediante el consumo de todo tipo de sustancias alucinógenas o evasivas, o mediante la ascensión en el efímero mundo de la televisión, nuestra sociedad esconde el anhelo por huir de su imposibilidad más grande, ese desasosiego que nos persigue como una sombra, como un amigo fiel que no cumple su función, el no ser nunca…
3 comentarios:
27 de octubre de 2010, 10:23
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
27 de octubre de 2010, 10:24
En Requiem for a dream, estamos ante el retrato de la paranoia que envuelve a la sociedad actual y a un nivel planetario. Con una facturación efectista y muy cercana a la también celebrada película El club de la lucha de David Fincher, Aranofsky emplea las técnicas más variadas como la doble pantalla, con algunos momentos muy logrados, aceleraciones de la imagen, planos destalle muy cortos, repeticiones constantes de las mismas acciones, etc. Elementos que a medida que transcurre el film nos arrastra hacia un estado opresivo y claustrofóbico, similar al que ahoga a los protagonistas.
No obstante, deberíamos retrotraernos hacia el momento en que los estados de bienestar se desmoronan y la sociedad se vuelve fragmentaria, y principalmente, en una comunidad como la americana donde proliferan como setas las filias más sorprendentes. Por ello, en Requiem for a dream se muestra el camino de sus protagonistas en pos de la autodestrucción en un intento desesperado y a cualquier precio del alcanzar su sueño, escapar de la sociedad donde las expectativas de progreso para determinados grupos han sido aniquiladas, no es otra cosa que el conocido lema, “Todo por un sueño”, muy similar a la imagen que ofrece el programa televisivo que bombardea constantemente a la madre de Harry, donde nos prometen la felicidad a la carta, constantemente, con un solo golpe de mando y con risas enlatadas. Sin embargo, tras este falso sueño se esconde un problema más amplio, siempre latente y nunca resuelto, que no es otro que el problema de la existencia; es decir, el problema de la existencia en el mundo contemporáneo, donde las desigualdades son enormes dentro de una misma comunidad, así como con respecto a otros países. Camuflado bajo un deseo de puro hedonismo, ya sea mediante el consumo de todo tipo de sustancias alucinógenas o evasivas, o mediante la ascensión en el efímero mundo de la televisión, nuestra sociedad esconde el anhelo por huir de su imposibilidad más grande, ese desasosiego que nos persigue como una sombra, como un amigo fiel que no cumple su función, el no ser nunca…
27 de octubre de 2010, 10:38
En Requiem for a dream, estamos ante el retrato de la paranoia que envuelve a la sociedad actual y a un nivel planetarioj emplea las técnicas más variadas como la doble pantalla, con algunos momentos muy logrados, aceleraciones de la imagen, planos destalle muy cortos, repeticiones constantes de las mismas acciones, etc. nos arrastra hacia un estado opresivo y claustrofóbico, similar al que ahoga a los protagonistas.
Por ello, en Requiem for a dream se muestra el camino de sus protagonistas en pos de la autodestrucción en un intento desesperado y a cualquier precio del alcanzar su sueño, escapar de la sociedad donde las expectativas de progreso para determinados grupos han sido aniquiladas, no es otra cosa que el conocido lema, “Todo por un sueño”, muy similar a la imagen que ofrece el programa televisivo que bombardea constantemente a la madre de Harry, donde nos prometen la felicidad a la carta, constantemente, con un solo golpe de mando y con risas enlatadas. Sin embargo, tras este falso sueño se esconde un problema más amplio, siempre latente y nunca resuelto, que no es otro que el problema de la existencia; es decir, el problema de la existencia en el mundo contemporáneo, donde las desigualdades son enormes dentro de una misma comunidad, así como con respecto a otros países. Camuflado bajo un deseo de puro hedonismo, ya sea mediante el consumo de todo tipo de sustancias alucinógenas o evasivas, o mediante la ascensión en el efímero mundo de la televisión, nuestra sociedad esconde el anhelo por huir de su imposibilidad más grande, ese desasosiego que nos persigue como una sombra, como un amigo fiel que no cumple su función, el no ser nunca…
Publicar un comentario